Pues ya por fin se había acabado el “pack” que compré en Bangkok y a partir de aquí, todo estaba por definir, no tenía nada reservado, iría planificando sobre la marcha. Definitivamente ésta es la forma de viajar que me gusta. La que me provoca sensaciones que no tienen nada que ver con un viaje programado.
Mi última noche en Koh Phangan cogí el ipad y busqué en Hostelworld un lugar donde pasar un par de noches en Krabi. Hice una reserva en el Popeye Guesthouse. Tenía todo lo que necesitaba, cama limpia, buena ducha, wifi y buena situación cerca de la playa de Aonang y la zona de marcha. Si es que si quieres que las cosas salgan bien tienes que hacerlas tú!!! 😀
El bus me dejó en algún lugar de Krabi, pero no sabía muy bien dónde. Serían sobre las 8 de la tarde, el día estaba muy feo, llovía. Tras un pequeño desconcierto inicial, conseguimos organizarnos en furgo-taxis dependiendo de las zonas a las que íbamos. En mi furgoneta coincidí con un par de españoles y unos holandeses. Allá iba yo creyéndome el más aventurero del mundo porque menos de 24 hrs antes no tenía donde dormir… cuánto había apurado!. Cuando de repente vi a los holandeses abriendo la guía de la “Lonely Planet” por la sección de hostels in Krabi. Señalando al conductor con el dedo el primero de la lista, y tratando de explicarle que no tenían donde dormir, que les explicara donde había más opciones. Anochecía, estaba lloviendo, en una ciudad que no conoces y no tienes donde dormir…. Llamadme loco, pero lo primero que pensé fue: VAYA PAR DE CRACKS!!
Ellos eran Indiana Jones y yo me quedaba en….
Los entendería más adelante en mi viaje a Indonesia, ahí no llevaba prácticamente nada organizado… fue bastante más divertido.
Había reservado solo una noche por si acaso no me gustaba, pero automáticamente la amplié a dos al hacer el “check in”. Krabi es un lugar fantástico, tiene de todo. Tiene buenas playas: Aonang, la bahía de Raylay Beach. Una más que decente vida nocturna, muchas tiendas para los aficcionad@s al shopping, y a tiro de “speedboat” tienes las islas paradisíacas Phi Phi islands (famosas por tener entre su archipiélago de islas a Maya Beach, donde se rodó la peli de La Playa) y Phuket. También es una fantástica zona para los aficionados al Rock Climbing.
Prácticamente solo estuve un día en Krabi. Lo dediqué a pasear por las calles de Krabi y descansar en la playa de Aonang.

Krabi – Aonang Beach

Aonang beach

Un compañero en la playa

Happiness 🙂
Me he quedado con ganas de volver a Krabi para:
- Ir a Railey beach
- Hacer rock climbing
Pero como siempre digo, en cierta manera me gustar quedarme con algo pendiente para tener una excusa para volver 😉
Mi última noche en Krabi salí a dar una vuelta y me encontré con uno de los grupos de españoles que había dejado hacia un par de días atrás en Phangan, y más tarde con el otro. No deja de sorprenderme el ir paseando por una ciudad desconocida y de repente escuchar: “ey mira el de Cadiz!” 😀 .
Nos pusimos al día de nuestras aventuras desde que nos despedimos hace un par de días con unas cuantas LEO’s y SINGHA’s (cervezas thais). A las cervezas le siguieron otros tantos buckets en algunos puestos ambulantes. Y acabamos dándolo todo en una disco de Krabi 😀
En este viaje parecía que yo siempre iba un día por delante, y al día siguiente los volvía a dejar . Me iba para las Phi Phi islands.
Tras acabar a altas horas de la madrugada… escuché que alguien llamaba a la puerta de mi habitación. Salté de la cama en ropa interior, abrí la puerta y vi que era el conductor de mi transporte a las Phi Phi islands. Me había quedado dormido….
Tenía que estar en la puerta de mi hostel a las 0900 y eran las 0910. Todos me esperaban… Le pedí por favor que me diera 5 minutos para cerrar la maleta y lavarme la cara.
La furgoneta nos llevó a la playa desde donde salía el “speedboat”. De camino a Phi Phi nos paseó por unas cuantas calas de aguas turquesas absolutamente increíbles. La lancha echaba el ancla y nos daba unas gafas y un tubo, acompañados de 20 minutos para hacer un poco de “snorkelling”, acercarte a la playa o lo que cada uno quisiera.

Una imagen vale más que mil palabras

Un agradable paseo
La última parada antes de llegar a Phi Phi era Maya Beach, la de “La Playa”. Es un lugar con un gran encanto, pero abarrotado de lanchas que traen a cientos de turistas armados con sus cámaras de fotos, dispuestos a hacerse la foto para el recuerdo (ver abajo), es más recomendable ir a primera hora de la mañana para evitar la acumulación de gente que se produce más tarde.

Uno que había por allí 😉

Maya beach
Por fin en Phi Phi!! mi primera impresión fue que el paisaje era increíble, pero el pueblo era un laberinto!! calles muy estrechas, no hay coches, solo motos o carritos empujados por personas y mucha gente. Solo iba a estar un día porque al día siguiente cogía un barco hacia Phuket, así que pensaba pasar el día de relax en la playa y tomar unas cervezas por la noche.
La noche anterior había hecho una reserva en el Seashell hut. Cumplía con mis habituales requisitos: precio decente (un poco caro en comparación con lo que venía pagando, pero Phi Phi es caro), cama limpia, ducha, y WIFI.

Barcos llegando a Phi Phi Don

Playa Norte de Phi Phi Don con la marea baja
Había dormido poco la noche anterior, estaba cansado, así que decidí comer algo y pasar la tarde de relax en la playa para recargar baterías.
Al anochecer, salí a tomar un par de cervezas y volví a encontrarme con uno de los españoles de la noche anterior que acababan de llegar. Fuimos a un bar que tenía un ring de Muay Thai para los clientes. Si te apetecía podías echar unos guantes con un amigo. Creo que por la mente de los dos pasó el darnos unos cuantos guantazos en el ring… pero lo dejamos para otra ocasión 😀

Bar en Phi Phi Don con ring de Muay thai para los clientes
Paseando de noche por las calles de Phi Phi es normal que te encuentres, muchos puestos de comida de todo tipo, pizzas, hamburguesas, thai food,… Llama la atención la multitud de 24 hrs Tattoo shops, no es raro ver a alguien tatuarse a las 3 de la mañana. A pie de playa hay Clubs con la música a tope, unos con música más comercial, otros electrónica, etc… En Phi Phi es especialmente destacable la gran cantidad de “guiris” borrachos por metro cuadrado…
Tenía claro que hoy no iba a quemar la noche de Phi Phi… aún tenía resaca de la noche anterior. Al día siguiente, cogía un barco a las 1400 hrs que me llevaba a Phuket, así que me acosté temprano, me levanté tranquilo y me permití un gran desayuno:

Desayuno en Phi Phi 😀
Paseé un poco por lo que me quedaba por ver, un poco de lectura en la playa… y a las 1400 estaba cogiendo el barco hacia mi siguiente destino: Phuket.
Nota: Me fui de Phi Phi sin ver el Viewpoint, desde donde se tiene una vision única de la isla, bueno… next time.
Tenía muchas ganas de ir a Pukhet. Esa fue una de las zonas más afectadas del Tsunami de 2004.
Deja un comentario